¿Cómo mejorar la convivencia durante el confinamiento?
Conoce las claves para mejorar la convivencia.
De cara a la incertidumbre y al aislamiento cada persona es distinta. Las reacciones varían en función del carácter y cada quien establece su propio sistema de supervivencia para resguardar su propia individualidad. Frente a esto, es común que los miembros de la familia terminan afectándose los unos a los otros.
Ante estas circunstancias la comunicación es clave. Aunque primero debemos identificar lo que nos funciona a la hora de recrearnos para después accionar en función de la interacción y la convivencia con los demás.
¿Es posible mejorar la convivencia durante el confinamiento?
Antes del coronavirus o Covid-19, la falta de tiempo era el principal problema en las relaciones familiares. No obstante, el confinamiento ha generado una situación muy diferente a la usual: Convivir las 24 horas del día en casa y en completo aislamiento.
Un reto que la mayoría de las familias alrededor del mundo debemos afrontar, pero que también admite la posibilidad de afianzar vínculos y mejorar las relaciones familiares.
En estas circunstancias, evitar algunos de los escenarios que se generan tras “la nueva normalidad” es prácticamente una necesidad ante la sobreexposición de la rutina y la desinformación que conciben las matrices de opinión.
Y es que frente esto, el resultado es obvio: niños hastiados, exceso de dispositivos inteligentes, estrés, ansiedad, comunicación sin filtro o, en su defecto, falta de comunicación.
Sin embargo, mediante la gestión de emociones y el respeto hacia el espacio personal de cada quien es posible fortalecer y prolongar la buena convivencia durante la crisis sanitaria.
Claves para mejorar la convivencia durante el confinamiento
Sabemos que no es sencillo. Pero con compromiso y practica podemos optimizar la rutina, adaptándola a la nueva realidad. Con esto en mente, podemos poner en marcha las siguientes claves para mejorar la convivencia durante el confinamiento:
- Identifica las emociones que generan malestar: Lo principal es conocerte y reconocer cuando te sientes agobiado (a). Luego, el siguiente paso será controlarte y actuar sobre el motivo y no sobre la emocionalidad.
- Consulta la información que lees: No todo lo que leemos proviene de fuentes confiables. Por lo tanto, será necesario consultar las fuentes de información, tomando en cuenta la imparcialidad de quien informa.
- Controlar el consumo de información: En relación a lo anterior, el consumo excesivo de información no nos mantiene mejor informados. Al contrario, el contenido desmedido es el causante principal del estrés y la ansiedad.
- No abuses de los dispositivos inteligentes: Pese a las medidas de seguridad e higiene, los seres humanos necesitamos de la interacción con otros para sobrevivir. Si bien las redes sociales son medios de comunicación e interacción con el mundo exterior, controlar su uso no sólo permite medir la cantidad de información que consumimos a diario, sino que además, facilita las relaciones con los demás miembros del hogar.
- Mantener las rutinas o crear nuevas en función de “la nueva normalidad”: Organiza horarios fijos para trabajar en casa, descansar, recrearse, hacer ejercicio, asearse y comer. Lo último es fundamental, ya que al estar en casa tendemos a comer compulsivamente debido a la inactividad.
- Buscar nuevas actividades que resulten gratificantes, en familia o individuales, que se puedan realizar con las restricciones: es importante seguir disfrutando de momentos placenteros, que son generadores de serotonina y noradrenalina y que por otro lado, nos ayudan a pasar los días en confinamiento.
¿Cómo manejar el estrés y la ansiedad entre los miembros de la familia?
Sabemos que no estás solo, así que seguir los pasos anteriores no será sencillo. Sobre todo si tomamos en cuenta que cada miembro de la familia tiene sus propias ideas, carácter y manera de reaccionar ante las circunstancias.
En este sentido, la integración será más que necesaria para establecer vínculos y horarios. Por tal motivo, los expertos aconsejan:
- Intentar mantener un discurso mental y verbal, donde no impere el catastrofismo y el negativismo. Es decir:
- Vamos a intentar enfocar nuestra atención en las cosas buenas que esta situación nos ha traído (porque hasta en lo malo, hay cosas buenas)
- Vamos a recordarnos que todo tiene fecha de caducidad. Por más que tarde, esto llegará a su fin.
- Vamos a centrarnos en sacarle partido a la situación. Quizá sea el momento perfecto para hacer algún curso online, empezar algún proyecto, alcanzar algún reto físico, aprender a cocinar…
- Vamos a repetirnos, que no somos adivinos y que ponernos en lo peor, no nos protege de nada y solo nos genera ansiedad.
- Vamos a asumir que el riesgo 0 no existe, pero que con sentido común y responsabilidad, se pueden hacer muchas cosas. Se puede VIVIR a pesar del Covid.
- Comunicarse de forma clara y precisa.
- Escuchar para ser escuchado.
- Realizar actividades juntos.
- Respetar los momentos de soledad.
- Y por supuesto, realizar psicoterapia online, en caso de que algún miembro de la familia llegue a necesitar ayuda profesional.
Si existe algún miembro de la familia que no quiera integrarse a las actividades en conjunto, lamentablemente tendremos que respetar dicha decisión. Sin embargo, es bueno dejar en claro que, si la persona en cuestión desea integrarse, siempre será bienvenido.
¿Qué hacer ante discusiones y malentendidos?
No podemos esperar que todo salga bien desde el principio, y mucho menos en circunstancias adversas o en situaciones desconocidas. De hecho, durante el confinamiento es común experimentar tanto la negación como la culpa. Dos emociones que dan lugar al resentimiento y a los malos entendidos.
Sabiendo esto, el siguiente paso será buscar la forma de manejarlo:
- Guardar distancia si nos sentimos agobiados, y comprender que pese al tiempo que pasemos en familia, es importante respetar el espacio de los demás.
- Tomar tiempo para relajarse y liberar tensiones.
- Usar la tecnología a nuestro favor para aprender nuevas actividades como el yoga o la meditación.
¿Cómo actuar para prevenir al miedo o el pánico?
Como hemos indicado anteriormente, el manejo de la información es fundamental en estos casos. Con esto en mente, recomendamos evitar:
- Hablar constantemente sobre el COVID-19.
- No distribuir información falsa o no verificada.
- No mentir sobre las circunstancias. En este sentido, tanto los niños como las personas mayores deben estar conscientes de lo que ocurre para que comprendan el porqué del confinamiento.
- Pero tampoco hay que dar toda la información en según qué casos. Ésta tiene que ser adaptada a la edad del interlocutor.
¿Cómo lidiar con el aburrimiento?
Saber qué hacer frente a la crisis sanitaria no es sencillo. Por consiguiente, el desarrollo de la creatividad será más que necesaria durante esta etapa:
- Aprovecha la oportunidad y realiza actividades de interés. Leer, ver películas y series, y hacer ejercicio son un ejemplo claro de ello.
- Aprende un nuevo oficio como pintar, hacer manualidades, hornear y hacer trucos de magia.
- Llama a los familiares y amigos que estén lejos.
- Recupera las viejas costumbres, como cenar en familia, jugar juegos de mesa y ver películas juntos.
¿Cómo fortalecer las relaciones de pareja durante el confinamiento?
El confinamiento se ha convertido (principalmente) en un reto para las parejas.
En muchos casos, hemos pasado de compartir tiempo y espacio unas pocas horas al día de lunes a viernes, a estar las 24 horas juntos toda la semana. Esto conlleva un proceso de readaptación emocional y también físico.
La situación ha hecho también, que el índice de casos depresivos y de ansiedad haya aumentado, y la duda sobre cómo ayudar a la pareja si tiene depresión o qué hacer para fortalecer una relación durante la etapa de cuarentena, crece constantemente.
Pero en líneas generales, las recomendaciones vendrían siendo las mismas: compartir tiempo de calidad, respetar los espacios y tiempos individuales, y en lo posible, hacer un reparto equitativo de tareas domésticas y cuidado de los niños. Aunado a esto, recomendamos:
- No tomar decisiones apresuradas en caso de conflictos comunes.
¿Cómo mantener a los niños pequeños ocupados durante el confinamiento?
Aunque la tecnología es una herramienta de gran utilidad, es importante establecer límites y asignar labores domésticas al margen de las nuevas actividades y rutinas diarias.
- Procuren jugar en familia para que los niños tengan actividad física y mental.
- Fomenta las tareas escolares como parte del sentido de responsabilidad.
- Háganles partícipes de algunas tareas domésticas, que les puedan resultar lúdicas.
¿Cómo hablar con los adolescentes?
La adolescencia es una etapa difícil en cuanto a desarrollo y adaptabilidad. Puede que el compromiso dependa de todas las partes involucradas, pero en este sentido, los padres deben comprender que:
- Es normal que el adolescente quiera diferenciarse y que, en la búsqueda de esas diferencias, tienda a llevar la contraria.
- Es fundamental respetar el espacio de cada uno.
- La comunicación y el diálogo es fundamental para establecer responsabilidades y fortalecer las relaciones afines.
¿Qué hacer en caso de familiares solos?
Ahora más que nunca será necesario hacer las paces con nosotros mismos para poder asistir a los demás. Por ello, en caso de tener familiares solos, los especialistas recomiendan:
- Recuperar y mantener el contacto con dicho familiar ya sea por llamada, videollamadas o mensaje de texto.
- Integrar al familiar a grupos de WhatsApp, Telegram o Facebook.
- Asegurarse de que tenga provisiones.
- Incentivarlo a realizar actividades de interés.
- Fomentar las terapias online en caso de ser necesario.
¿Qué hacer en casos de violencia doméstica?
Si usted o algún conocido sufren de violencia doméstica, pida ayuda lo antes posible. El estrés por el confinamiento no justifica ningún ataque físico y/o emocional agravante.
Sabemos que es difícil, pero busque la manera de comunicarse con el servicio de emergencia lo antes posible. Para sesiones de terapia online, recuerde que estamos para ayudarle. ¡Contáctenos!